Encontraron a Susana Beatriz Montoya, de 74 años, muerta en su casa. Es la madre de Fernando Albareda, militante de HIJOS, quien había sido amenazado hace unos meses. Susana presentaba signos de haber sido víctima de un violento ataque: tenía un golpe en la cabeza y una puñalada en su cuello. En una pared de la casa escribieron: “Los vamos a matar a todos. Ahora vamos por tus hijos. #Policía”.

El 8 de diciembre pasado Fernando Albareda recibió fuertes amenazas. En su casa pegaron amenazantes carteles con esvásticas y dejaron 6 balas en la puerta. “Sos hijo de Terrorista. Se te terminaron los amigos de la Policía. No vayas más a la ESC (escuela) ni a la Jefatura. Va a morir. Te vamos a juntar con tu papito”, decían algunos de los carteles anónimos.

El padre de Fernando y marido de Susana fue Ricardo Fermín Albareda, subcomisario de la Policía de la provincia de Córdoba y militante del ERP. Ricardo fue secuestrado el 25 de septiembre de 1979 a manos de una patota comandada por Raúl Telleldín, el tenebroso jefe del Departamento de Informaciones de la Policía de Córdoba (D2), donde funcionó un centro clandestino de detención, tortura y exterminio (CCDTyE). Ricardo fue torturado brutalmente y asesinado en el CCDTyE Chalet de Hidráulica y hasta el día de hoy continúa desaparecido. Su crimen fue juzgado en 2009 en el juicio Menéndez II.

 El peligro del negacionismo institucionalizado

El asesinato de Susana se da en un contexto particular, signado por los discursos de Milei negacionistas del genocidio, la visita de diputados de La Libertad Avanza al genocida Astiz, los desfiles militares con genocidas en los palcos y numerosas acciones reivindicativas del terrorismo de Estado. Todo esto actúa como un paraguas que ampara, legitima e instala una sensación de impunidad para ataques aberrantes de este tipo.

Apartar a la policía y conformar una comisión investigadora independiente

Los hechos son gravísimos y requieren un urgente esclarecimiento. La sola posibilidad de que la policía pueda estar involucrada amerita el inmediato apartamiento de esa fuerza de cualquier tarea relacionada con la investigación del caso.

Necesitamos juicio y castigo a los culpables y para eso debemos llegar a la verdad de lo sucedido. Para avanzar en esa dirección, es necesario conformar una Comisión Investigadora Independiente, integrada por familiares, organizaciones de derechos humanos y personalidades de trayectoria intachable, que sean una verdadera garantía de verdad y justicia por Susana

El comunicado de HIJOS Capital

𝗗𝗲𝘀𝗱𝗲 𝗹𝗼𝘀 𝗼𝗿𝗴𝗮𝗻𝗶𝘀𝗺𝗼𝘀 𝗱𝗲 𝗗𝗗𝗛𝗛 𝗱𝗲 𝗖𝗼𝗿𝗱𝗼𝗯𝗮 𝗻𝗼𝘀 𝗲𝗻𝗰𝗼𝗻𝘁𝗿𝗮𝗺𝗼𝘀 𝗰𝗼𝗻𝘀𝘁𝗲𝗿𝗻𝗮𝗱𝗼𝘀, 𝗽𝗿𝗲𝗼𝗰𝘂𝗽𝗮𝗱𝗼𝘀 𝘆 𝗼𝗰𝘂𝗽𝗮𝗱𝗼𝘀, 𝗽𝗼𝗿 𝗲𝗹 𝘃𝗶𝗼𝗹𝗲𝗻𝘁𝗼 𝗮𝘀𝗲𝘀𝗶𝗻𝗮𝘁𝗼 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗺𝗮𝗱𝗿𝗲 𝗱𝗲 𝘂𝗻 𝗰𝗼𝗺𝗽𝗮𝗻̃𝗲𝗿𝗼 𝗱𝗲 𝗛.𝗜.𝗝.𝗢.𝗦. 𝗖𝗼́𝗿𝗱𝗼𝗯𝗮, ocurrida este último viernes y las amenazas que cobardemente dejaron, dirigidas a toda su familia, donde firmaba “#Policía”.

Fernando Albareda es hijo de un policia que fue secuestrado y desaparecido en 1979 en el Ex Centro Clandestino de detención conocido como “Casa de Hidráulica”. 𝙍𝙞𝙘𝙖𝙧𝙙𝙤 𝙁𝙚𝙧𝙢𝙞𝙣 𝘼𝙡𝙗𝙖𝙧𝙚𝙙𝙖, subcomisario de la Policía de Córdoba, militaba en el PRT y tenía 37 años cuando fue secuestrado y desaparecido por la dictadura cívico-militar en septiembre de 1979, según se pudo determinar en el juicio que se realizó (y que precisamente se conoce como la “Causa Albareda”).

𝗘𝘅𝗶𝗴𝗶𝗺𝗼𝘀 𝗮 𝗹𝗮 𝗝𝘂𝘀𝘁𝗶𝗰𝗶𝗮 𝗱𝗲 𝗖𝗼́𝗿𝗱𝗼𝗯𝗮 𝘆 𝗮𝗹 𝗽𝗼𝗱𝗲𝗿 𝗘𝗷𝗲𝗰u𝘁𝗶𝘃𝗼:

➡️ La urgente investigación y esclarecimiento de este hecho, como así también las amenazas sufridas por todos los integrantes de su familia, denunciadas con anterioridad.

➡️ La seguridad y protección EFECTIVA YA al compañero Fernando Albareda y a

toda su familia.

𝐋𝐨𝐬 𝐝𝐢𝐬𝐜𝐮𝐫𝐬𝐨𝐬 𝐝𝐞 𝐨𝐝𝐢𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐩𝐞𝐫𝐦𝐚𝐧𝐞𝐧𝐭𝐞𝐦𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐜𝐢𝐫𝐜𝐮𝐥𝐚𝐧 𝐞𝐧 𝐧𝐮𝐞𝐬𝐭𝐫𝐚 𝐬𝐨𝐜𝐢𝐞𝐝𝐚𝐝 𝐬𝐨𝐧 𝐞𝐥 𝐩𝐞𝐥𝐢𝐠𝐫𝐨 𝐥𝐚𝐭𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐝𝐞 𝐜𝐮𝐚𝐧𝐝𝐨 𝐯𝐞𝐫𝐝𝐚𝐝𝐞𝐫𝐚𝐦𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐩𝐚𝐬𝐚𝐧 𝐚 𝐥𝐚 𝐚𝐜𝐜𝐢𝐨́𝐧. ¡𝐘𝐀 𝐃𝐈𝐉𝐈𝐌𝐎𝐒 𝐍𝐔𝐍𝐂𝐀 𝐌𝐀́𝐒!

#NuncaMás

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Fuente: periodismodeizquierda.com / Foto portada Imagen: Bambacoop