Se trata del financiamiento de una convocatoria para proyectos que benefician a comunidades indígenas de zonas secas, junto a los gobiernos locales, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo y el Fondo para el Medio Ambiente Mundial. El aporte realizado es de $ 40 millones.
El ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, Juan Cabandié, rubricó las cartas acuerdos con comunidades indígenas para fortalecer el acceso al agua segura de 589 familias que habitan en zonas de tierras secas de NOA y Cuyo. De esta manera, se efectiviza la adjudicación de los montos —que agregados ascienden a casi $ 40 millones— para 21 proyectos de una convocatoria destinada a la realización de prácticas de manejo sustentable de tierras en estas regiones, basadas en la implementación de pequeñas obras hídricas de captación, conducción, almacenamiento y distribución de agua para consumo doméstico, producción agrícola y pecuaria, y la gestión integrada de los recursos hídricos para aumentar la eficiencia en su uso.
El ministro nacional celebró la realización de las obras “que van a beneficiar a distintas familias y comunidades”, a la vez que valoró a los pueblos originarios “por su historia, su lucha, su dignidad y sus métodos ancestrales”. En tal sentido, aseguró: “Para nosotros esto es una reparación”, y también dijo: “De esta manera, estamos avanzando en políticas socioambientales e inclusivas para las comunidades que se dedican a la agricultura, la ganadería y al aprovechamiento de los recursos naturales. “Tenemos la obligación de pensar en nuestra Madre Tierra, en nuestro patrimonio natural”, expresó.
Cabandié también explicó: “Esta degradación ambiental y el corrimiento del territorio, que ha ejercido la sociedad desde la colonia a esta parte, han hecho que muchas comunidades no tengan acceso a recursos fundamentales, como el agua, lo que es un derecho humano que habilita otros derechos, como tener condiciones de vida digna, el derecho al trabajo y a una buena calidad de vida”. Por eso, estos proyectos, “vienen a saldar una deuda pendiente”.
Los proyectos se implementan en las provincias de Jujuy, Salta, Tucumán, Catamarca, San Juan y Mendoza; en las ecorregiones de la puna, el monte de sierras y bolsones y el monte de llanuras y mesetas. La convocatoria mencionada se realizó entre el 1 de marzo y el 30 de junio del año en curso. Las cartas acuerdo suscriptas en esta oportunidad fueron las de las provincias de San Juan y Tucumán.
A través del proyecto “Manejo sustentable de tierras en zonas secas de NOA y Cuyo”, a cargo del Ministerio de Ambiente nacional junto al Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) —como agencia de implementación de los fondos aportados por el Fondo para el Medio Ambiente Mundial —, es posible el fortalecimiento de la gobernanza de los bienes y servicios ambientales de tierras secas. Esto se logra con la colaboración de los gobiernos provinciales, la conformación de comités multisectoriales, la formulación de programas de acción provincial para la lucha contra la desertificación, la sequía y la degradación de tierras como columna vertebral de la política pública, así como también la generación de información estratégica para la toma de decisiones. Como dato ilustrativo, se puede mencionar que las intervenciones sistémicas y holísticas que se implementan permitirán afrontar el flagelo de la desertificación, que en Argentina afecta al año 650 mil hectáreas de tierras y a sus habitantes.
Cabe señalar que los proyectos cuentan con apoyo técnico de los gobiernos provinciales, la Secretaría de Agricultura Familiar Campesina Indígena, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), las universidades y diversas ONG de la zona. El Instituto Nacional de Asuntos Indígenas, por su parte, acompañó la realización de la convocatoria y facilitó a las comunidades la presentación de la documentación requerida en las bases y condiciones de la convocatoria.
Fuente: Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación