Equipos de ACUMAR se formaron en los nuevos dispositivos portátiles de tecnología LeadCare que se utilizan en los operativos de toxicología en el territorio.

ACUMAR realizó una capacitación en su Unidad Sanitaria Ambiental (USAM) de la Ciudad de Buenos Aires sobre la tecnología LeadCare para personal de enfermería y extraccionistas que participan de los operativos de toxicología que se llevan a cabo a lo largo de la Cuenca Matanza Riachuelo.

El LeadCare es un analizador portátil de plomo en sangre utilizado por los equipos de toxicología de ACUMAR en distintos puntos del territorio que por sus características propias permite un alto grado de sensibilidad, precisión e inmediatez en los resultados.

En el encuentro, se presentaron los nuevos dispositivos y se reforzó su uso adecuado. Además se explicó el procedimiento de las extracciones de sangre y el registro de datos en las planillas de cadenas de custodia, consentimiento informado y las utilizadas para cargar la información al Sistema Nacional de Vigilancia de la Salud.

“Desde el organismo impulsamos la educación permanente y la actualización de nuestros equipos de salud para la utilización de esta herramienta que permite trabajar en una problemática presente en muchos ámbitos urbanos, tales como nuestra Cuenca”, destacó el presidente de ACUMAR, Martín Sabbatella.

Durante las Evaluaciones Integrales de Salud Ambiental en Áreas de Riesgo (EISAAR), se realizan extracciones a la población cuya historia clínica ambiental sugiere la posibilidad de exposición a plomo. De confirmarse, se realiza un seguimiento y se informan las medidas higiénicas y dietéticas a tener en cuenta para disminuir la exposición a este metal.

“Los nuevos equipos permiten evaluar de manera rápida, temprana y con alto grado de fiabilidad la exposición por plomo. Es un recurso que ponemos a disposición de todo el sistema sanitario de la Cuenca”, sostuvo la directora de Salud y Educación Ambiental, Maru Dakessian

En el caso de personas con plombemias muy elevadas, se indica tratamiento médico específico que es supervisado por el equipo de toxicología de ACUMAR, pero sólo ocurre en casos excepcionales.

Exposición al plomo

La intoxicación por plomo suele ser silenciosa, con una presentación subclínica, la cual se caracteriza por trastornos a nivel neurocognitivo. Por ello, su diagnóstico requiere análisis al detectarse posibles fuentes de contaminantes.

Las infancias son especialmente vulnerables a los efectos tóxicos del plomo, que puede tener consecuencias graves y permanentes en su salud, afectando en particular al desarrollo del cerebro y del sistema nervioso. El plomo también causa daños permanentes en las persona adultas, por ejemplo aumentando el riesgo de hipertensión arterial y de lesiones renales.

¿Qué es el plomo y para qué se usa?

El plomo es un metal pesado presente de forma natural en la corteza terrestre al cual se le han dado múltiples utilidades productivas a lo largo de los años, tanto por su durabilidad como por su flexibilidad, formando parte, por ejemplo, de las tuberías domésticas, la soldadura de latas de conserva, como aditivo en las naftas, o en pinturas. Con el tiempo, muchos de estos usos se prohibieron o se limitó su concentración aceptada, ya que su uso generalizado ha dado lugar en muchas partes del mundo a una importante contaminación del ambiente, un nivel considerable de exposición humana y graves problemas de salud pública.

Desde ACUMAR, se ha seleccionado al plomo como biomarcador de exposición por excelencia a los contaminantes ambientales, ya que se trata de un compuesto orgánico persistente y de útil trazabilidad tanto en los organismos vivos como en el ambiente.

¿Cuáles son las fuentes principales de contaminación por plomo en la Cuenca Matanza Riachuelo?

Se destacan las actividades laborales informales tales como el acarreo y acopio de chatarra, la quema de residuos eléctricos y electrónicos, el reciclado informal de baterías, o formal sin los elementos de protección personal y buenas prácticas de cuidados. En muchos casos, las infancias se encuentran expuestas en estas actividades por realizarse en el mismo hogar, o por acompañar a las, les y los adultos responsables en la jornada. Otras fuentes son suelos contaminados por acopio de chatarra o de origen fabril, así como pinturas con plomo en los domicilios.     

Fuente: Prensa Acumar