La situación climática es compleja, pero están todos los medios aéreos y brigadistas a disposición, informó el Servicio Nacional de Manejo del Fuego, dependiente del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación que envío recursos materiales  y personal especializado a las provincias de Río Negro, Neuquén y Chubut para el combate de los focos activos.

En Bariloche se registra un foco activo en Lago Martín y otro contenido en Bahía López. Allí trabajan la directora de Operaciones del SNMF, Lorena Ojeda, y un coordinador regional. Además, en la zona se encuentran a disposición 86 combatientes de diversas fuerzas y, para el apoyo aéreo, un avión anfibio, un observador y dos helicópteros con helibaldes. Entre otros recursos, pueden mencionarse un camión Unimog, tres camiones hidrantes, uno de comunicaciones, once camionetas pick up, una camioneta de traslado y dos embarcaciones.

Por su parte, en Neuquén permanece activo un foco en el Lote 39, mientras está controlado otro en Pehuen-Co, Aluminé.

En Chubut está activo el foco de Cushamen, en la zona de Cerro Radal, y están controlados los incendios en Tehuelches, Río Senguer y Futaleufú.

A través del SNMF, Nación refuerza su aporte de personal, equipamiento y medios aéreos, en colaboración con las provincias y fuerzas de seguridad nacionales para combatir los incendios forestales en la Patagonia. “Por el momento no ha habido víctimas ni pérdida de bienes”, señaló el secretario de Control y Monitoreo Ambiental, Sergio Federovisky.

En tal sentido, el funcionario explicó que “todo esto está enmarcado en un escenario que es una sequía enorme, que hace dos años está afectando la totalidad del país”. Agregó que “en el caso particular de la Patagonia andina, que tiene el verano como la estación seca, está muy acentuada porque prácticamente no hubo nieve durante el invierno y, en este momento, las temperaturas son altas y los tenores de humedad muy bajos”. “Estamos ante un fenómeno global y asociado al cambio climático”, puntualizó.

El funcionario detalló asimismo que, en total, hay “más de 200 brigadistas distribuidos a lo largo de los tres focos en la Patagonia y más de una docena de medios aéreos”. Pero agregó: “Siempre hay que señalar que los medios aéreos son una complementariedad. No son la solución al problema porque el fuego se trabaja, se combate y se controla desde tierra principalmente. El fuego en el aire se contiene con agua para poder enfriar la zona y poder acceder, pero no se apaga normalmente desde el aire”.

Además, Federovisky se refirió a la mejora del financiamiento del manejo del fuego: “A través de una ley, que logramos nosotros en diciembre del año pasado en el Congreso, pudimos tener una alícuota de la póliza de seguros del 3 por mil que va a un fideicomiso de uso exclusivo para el Servicio Nacional de Manejo del Fuego. Y eso supuso para este año un presupuesto siete veces superior, obviamente, al del último año de gobierno de Mauricio Macri”.

En Bariloche se registra un foco activo en Lago Martín y otro contenido en Bahía López. Allí trabajan la directora de Operaciones del SNMF, Lorena Ojeda, y un coordinador regional. Además, en la zona se encuentran a disposición 86 combatientes de diversas fuerzas y, para el apoyo aéreo, un avión anfibio, un observador y dos helicópteros con helibaldes. Entre otros recursos, pueden mencionarse un camión Unimog, tres camiones hidrantes, uno de comunicaciones, once camionetas pick up, una camioneta de traslado y dos embarcaciones.

Se destaca que, en la localidad rionegrina, Nación facilitó todos los medios aéreos solicitados, que están disponibles para operar cuando las condiciones meteorológicas lo permitan. Cabe señalar que la escasa visibilidad que se registra dificulta el accionar de las aeronaves.

Sobre este incendio, Federovisky precisó: “se inició hace ya varios días como resultado de una tormenta eléctrica, por un rayo que cayó en una zona inaccesible. Como resultado del viento y su rotación, se desplazó hacia el este”. Agregó que se presentó una dificultad: “la columna de humo impidió en todo el día de ayer el sobrevuelo, por lo tanto solo se pudo trabajar por tierra y eso obviamente disminuye las posibilidades”.

El funcionario también explicó que incendios como el de Bariloche son de “muy difícil abordaje” debido a las condiciones meteorológicas “y además, se da en una zona muy inaccesible, donde no se puede llegar por tierra, donde el combate no se puede hacer desde el terreno, las dificultades indudablemente crecen”.

El escenario presente, las condiciones climáticas y la posible evacuación se informarán de forma directa a los habitantes de las jurisdicciones afectadas. En tanto, se prolonga el cierre de El Manso y Villegas hasta el 1 de enero para todo tipo de uso público. Las autoridades solicitan que, por estrictas razones de seguridad, no se acerquen de forma espontánea a combatir los incendios voluntarios ni agrupaciones.

Por su parte, en Neuquén permanece activo un foco en el Lote 39, mientras está controlado otro en Pehuen-Co, Aluminé. Sobre esta zona de incendios, Federovisky aseguró que “está relativamente mejor a lo que estaba en el día de ayer y antes de ayer”.

En la zona trabajan el director nacional del SNMF, Alberto Seufferheld, un coordinador y una asistente técnica. Para el combate de estos incendios, la Nación convocó 84 brigadistas de incendios forestales y desplegó cinco aviones hidrantes y cuatro helicópteros para el traslado de personal y la descarga de agua.

En Chubut está activo el foco de Cushamen, en la zona de Cerro Radal, y están controlados los incendios en Tehuelches, Río Senguer y Futaleufú. En la provincia trabaja un coordinador de la Región Centro del SNMF y 56 brigadistas, con el apoyo de dos aviones hidrantes y dos helicópteros —uno para traslado y otro con helibalde—, también trabajan dos camiones autobomba.

Cabe agregar que el secretario Federovisky recomendó, para quienes quieran visitar la Patagonia este verano, se debe tener en cuenta “en qué ecosistema están haciendo sus vacaciones” y tomar recaudos. Cabe mencionar, que está desaconsejado hacer fuego: “De hacerlo, hay que garantizar que ese fuego se realice en zonas donde está expresamente permitido, con previa autorización de las autoridades locales, y apagarlo muy a conciencia. Pensemos que una pequeña chispa puede provocar un desastre de proporciones”, manifestó el funcionario.

Fuente: Ministerio de Ambiente de la Nación