Con el compromiso y militancia como bandera el 14 de abril de 1995 se reunieron por primera vez en Río Ceballos, Córdoba, jóvenes que tenían en común ser descendientes de desaparecidos, presos políticos y exiliados de la última dictadura, cívico, militar, eclesiástica.
“Como a los nazis le va a pasar, a donde vayan los iremos a buscar”, fue la consiga que resonó en todo nuestro país, y que definía la esencia de su lucha.
HIJOS (Hijos e Hijas por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio) es una organización de derechos humanos de Argentina, con filiales en distintos puntos de ese país conformada principalmente por hijos e hijas de desaparecidos durante la última dictadura.
Sus objetivos son la lucha contra la impunidad, la reconstrucción fidedigna de la Historia, la restitución de la identidad de los hermanos y familiares secuestrados y apropiados, así como la reivindicación del compromiso histórico de sus padres y sus compañeros. Y fundamentalmente la cárcel efectiva y perpetua para todos los responsables de crímenes de lesa humanidad de la última dictadura cívico-militar argentina, sus cómplices, instigadores y beneficiarios.
La organización se caracteriza por una forma horizontal de funcionar, es decir, que todas las decisiones se toman en el ámbito de una asamblea en la cual pueden participar todos sus integrantes.
En muchas filiales regionales, la organización también está integrada por jóvenes que, sin tener ningún familiar afectado directamente por la dictadura, se sienten representados por los puntos básicos de HIJOS y su política manera de hacer.
En épocas en que los genocidas gozaban de la impunidad que les otorgaba la falta de actuación judicial para castigar sus delitos aberrantes, fueron decisivas las acciones de la organización para denunciar -mediante movilizaciones a los domicilios o lugares de trabajos- a los genocidas sin castigo, y de esta manera hacer visibles a los mismos ante sus vecinos y la opinión pública.
