Se cumple un nuevo aniversario de la Revolución de Mayo la gesta patriótica que inició con mayor vigor el camino hacia nuestra constitución como nación. La revolución desde su inicio se debatió en una feroz lucha entre los patriotas que aspiraban a la emancipación de todo poder extranjero y los sectores -no tan numerosos, pero muy poderosos- que anhelaban a continuar siendo colonia del imperio de turno.  La disputa, grieta, ¿lucha de clases?. Fue sangrienta y no tuvo vencedores definitivos y aún hoy marcan el presente de nuestra realidad.

A lo largo de nuestra historia, se suceden permanentemente ciclos de estados populares y ciclos de procesos conservadores, liberales o neoliberales, justamente porque la disputa no fue saldada.

Disputa, grieta, ¿lucha de clases?. Más allá de lo ideológico, siempre en el fondo la lucha es económica. Y es económica enfrentando a quienes aspiramos un país para todos y quienes propugnan un país para pocos, dejando a las mayorías fuera.

Y es básicamente económico porque esto implica como repartir la renta nacional. O repartirla para que llegue a todos o para que sólo llegue al grupúsculo de los que se creen los dueños del país.

Disputa, grieta, lucha de clases?

Recién se va poder resolver cuando uno de los dos espacios de la sociedad logre someter al otro y dejarlo sin alternativas. Y lamentablente todo indica que esto, no será por consenso.