El fotógrafo, fue atacado y herido por un disparo de gas lacrimógeno durante la represión -impulsada por Milei y Bullrich- frente al Congreso el último 12 de marzo.

Tras 55 días en terapia intensiva el reportero gráfico subió hasta la terraza del Hospital Ramos Mejía y pudo disfrutar del aire fresco.
En su mejora fueron fundamentales los médicos y enfermeras que muestran el nivel de nuestros hospitales públicos.
“La alegría es total. El agradecimiento es eterno”, posteó la cuenta Justicia por Pablo Grillo, donde impulsan la lucha por justicia
