Fueron incorporados por ACUMAR, los nuevos sensores miden de forma automática gases y partículas; y permitirán determinar la composición del aire en distintas zonas de la Cuenca, así como controlar su calidad de un modo integral.
Como parte de sus políticas para monitorear el estado del ambiente, la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR) diseñó un sistema que permita tener un control integral en áreas críticas en materia de emisiones gaseosas en la Cuenca.
En este marco, el organismo adquirió cinco equipos de tecnología innovadora en el país, para la medición de distintos contaminantes en el aire, junto con sus respectivas estaciones meteorológicas asociadas, para el monitoreo automático de la calidad del aire en dichas áreas definidas.
El presidente de ACUMAR, Martín Sabbatella, resaltó que: “La incorporación de tecnologías de avanzada para el control de la calidad del aire forma parte de una gestión comprometida a alcanzar los objetivos delineados en el Plan Integral de Saneamiento Ambiental y conseguir monitoreos cada vez más precisos que permitan seguir cuidando el ambiente y la salud de cada habitante de la Cuenca”.
Inicialmente, y durante un periodo de 30 a 90 días, con el objetivo de realizar pruebas comparativas e intercalibraciones, los equipos se instalaron donde se encuentra ubicada desde hace más de diez años la Estación de Monitoreo Continuo y Automático de Dock Sud (EMC I). De esta manera, no solo se podrán comparar los valores de las microestaciones entre sí, sino que las mismas se cotejarán con la estación de referencia (EMC I) para evaluar su desempeño.
Estas innovadoras microestaciones monitorean gases como monóxido de carbono (CO), Ozono (O₃), dióxido de azufre (SO₂), Compuestos Orgánicos Volátiles (COVs), ácido sulfhídrico (H₂S), o dióxido de nitrógeno (NO₂), además de material particulado en tres fracciones (PM1, PM2,5 Y PM10).
El director general Ambiental de ACUMAR, Bruno De Alto, destacó que: “Algunos de los beneficios de la incorporación de esta tecnología tienen que ver con la extensión de la actual red de monitoreo, la expansión el área de cobertura geográfica a un bajo costo y la posibilidad de detección y determinación de zonas de acumulación de contaminantes, lo que posibilitará el seguimiento y la detección de fuentes de emisión”.
Estos equipos también permitirán realizar alertas tempranas epidemiológicas, obtener mapas en tiempo real de estados de situación y realizar monitoreos de contingencias ambientales. Asimismo, una novedosa ventaja que ofrecen es que, por sus características, es viable su traslado a posibles nuevas áreas críticas.
Fuente: Prensa Acumar
