Alberto Fernández participó este lunes del programa radial de Mex Urtizberea, se lo vio distendido, alegre y fuera de la realidad. No habló, ni mencionó ningún aspecto trascendente de la actualidad. Pero sí, relató que desearía que en una película sobre su vida lo interpretara el actor Robert de Niro. En esos momentos el dólar alcanzaba los 450 pesos.
Como es posible, que quien tiene la responsabilidad de conducir el país, dedique sus horas para ser parte de un espacio frívolo, hablar sandeces y contar anécdotas ridículas.
Debería, ponerse al frente y proponer medidas urgentes, para frenar la pobreza en aumento, los precios disparados y la corrida de dólar.
Pero no, parece ser que ese no es su problema.
Quien gobierna.
Pero lo peor, es que todavía tendremos que padecer los largos meses que faltan hasta el final de su mandato. Y todavía puede llegar a hacer más daño.